Universidad Católica Boliviana "San Pablo"

56 entender estos aspectos y tratar de ayudar a la persona mayor a no cerrarse en la comunicación, en esta tarea principalmente debe intervenir la familia y si la persona vive en un hogar, deben ser colaborados por el personal. Para Garcia; Ellgring (2010:57) “Las relaciones personales son una necesidad intrínseca que se manifiesta desde las edades más tempranas. Las personas de cualquier edad funcionan mejor cuando sienten que otros se ocupan de ellas y reciben amor y afecto”. Esto es un hecho de la vida, el ser humano es un ser social por naturaleza que necesita de la relación con el otro para su bienestar propio. Antes ya se mencionó, que la red social de los adultos mayores se reduce; esto puede explicarse por la Teoría de la Selectividad Socioemocional que fue propuesta por Carstensen, esta explica que el contacto social declina con la edad debido a una selectividad emocional, la reducción de contactos sociales es porque la persona mayor elimina las relaciones irrelevantes y mantiene las más significativas (Cf. DEL VALLE, 2011). La familia es el núcleo de la sociedad y en la adultez tardía esta adquiere mayor relevancia, en la mayoría de los casos es la principal fuente de apoyo para la persona mayor y es acogida en su hogar formando así familias multigeneracionales (Cf. PAPALIA, 2004). A pesar de este panorama, en muchos casos los adultos mayores padecen enfermedades crónicas o sufren alguna discapacidad por lo que necesitan cuidados especiales de manera casi permanente, y los hijos se ven en la necesidad de buscar ayuda ya sea domiciliaria o en centros de acogida para adultos mayores; sin embargo, en varios casos las relaciones con los familiares se mantienen igual ya que realizan visitas de manera frecuente o los sacan a pasear algún fin de semana. El mantenimiento de estas relaciones es necesario para que el adulto mayor se sienta acompañado y mantenga las relaciones con su red pequeña pero significativa.

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