Universidad Católica Boliviana "San Pablo"

71 financieras a corto plazo (capital+intereses) y a partir de dicha evaluación se determina el perfil de riesgos al cual pertenece de acuerdo a la normativa ASFI, la cual asigna a los deudores en cinco categorías que son: A, B, C, D y E. Cabe señalar que las calificaciones se centran principalmente en el análisis de la capacidad de pago pero hay otros factores que pueden ser determinantes para proceder al deterioro de un cliente. El objetivo al que se quiere llegar es determinar en qué momento el cliente sufre este detrimento. Para determinar los rangos de valores que corresponden a los perfiles de donde se estimarán los ratios para clasificar a los clientes, se parte de la siguiente suposición: Ya que la razón de EBITDA_GtosFin nos indica la capacidad que tiene el cliente en veces, para cubrir sus obligaciones financieras de intereses pero no toma en cuenta el pago del capital. Siguiendo esta lógica el que la razón dé como resultado 1 indica que es capaz de cubrir el pago de intereses a corto plazo 1 sola vez, entonces, ésta no toma en cuenta el monto del capital, por lo que una empresa con un ratio de 1 indica que tiene la capacidad para pagar la totalidad de los intereses pero no así el capital, es decir según directrices de la ASFI a este cliente le correspondería la categoría C, ya que cumple con el pago de los intereses pero el pago del capital es dudoso. Bajo esta línea se asume que, de acuerdo a criterios que fueron discutidos con expertos en el tema después de un análisis de varios casos se determinó que un resultado de entre 2,5 (valor de la mediana es de 2,22 en 2017) o superior indicaría que el cliente puede cumplir con sus obligaciones financieras tanto de capital e intereses a corto plazo con los recursos que dispone después de deducir todos los gastos operativos de sus ingresos. Por lo que éste es el parámetro que se toma para dividir a la muestra en dos grupos.

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